Sin duda, esta iniciativa surgida en el año 2013, es sin duda el pistoletazo de salida de la fiesta del Cascamorras donde aquí los auténticos protagonistas son los niños y niñas, que junto con sus padres y familiares disfrutan de una carrera donde el aceite se convierte en confeti y donde el Cascamorras "juguetea", disfruta y se acerca a los más pequeños para que lo conozcan mejor.
Y un año más, cientos de personas, tal vez unas 3000, se congregaban en la tarde de hoy 5 de septiembre en las inmediaciones de la Plaza de las Eras y parque de la la Alameda donde voluntarios de protección civil, Cáritas y Cruz Roja pintaban las caras de los niños en un ambiente festivo y lúdico.
Jesús Samaniego, el Cascamorras de Honor, encarnaba el papel de Juan Pedernal para realizar una carrera limpia, llena de sorpresas y que concluía en el templo de la Piedad tras realizar las pertinentes juras de bandera.
En el interior del Templo, tanto el rector como la Hermana Mayor de la hermandad de la Virgen de la Piedad, recibían al Cascamorras y tras un momento de oración anta la Sagrada Imagen se daba por concluida esta intensa jornada.
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