La previsiones meteorológicas avisaban que la tarde iba a estar inestable y de hecho, ha estado lloviendo e incluso cayendo aguaceros antes de las ocho, hora que estaba prevista la salida procesional de la Virgen de la Piedad. Por este motivo, la Hermandad patronal tras realizar el correspondiente "cabildo de aguas" ha optado por no realizar la procesión de alabanza ante la posibilidad de que la lluvia hiciera acto de presencia.
No obstante, la lluvia no ha impedido la presencia del Cascamorras, de las hermandades y cofradías, de las mantillas y reinas de las fiestas así como de la Corporación Municipal que bajo mazas entraba en el templo mercedario y de bastantes fieles devotos que han querido manifestar su amor y cariño a la Virgen de la Piedad.
La Banda de Música de Benalúa tocaba una marcha procesional mientras se ubicaba la Sagrada Imagen a los pies del altar mayor portada por el cuerpo de horquileros de la Virgen para así dar comienzo el rezo del Santo Rosario que ha estado presidido por el administrador diocesano, José Francisco Serrano, franqueado por el rector del Templo y la Hermana Mayor.
Sin duda se han vivido momentos de emoción pues la tristeza inundaba el Templo de la Piedad llegado a emocionar a muchos de los presentes, entre ellos a José Heras, el Cascamorras de 2018.
1 Comentarios:
¡Que pena no ver procesionar a nuestra madre por las calles de Baza!